Emilia Clarke
Gtres

MUY FAVORECEDOR

Emilia Clarke estrena el 'rubio brownie' que añade luz a la melena, al rostro y potencia el bronceado

Este tono de pelo con estilo californiano, a medio camino entre el rubio y el moreno, es el favorito de celebrities como Beyoncé o Rita Ora para verano.

Con la llegada del verano, lo hacen también nuestras ganas de atrevernos con los cambios de look más atrevidos y, curiosamente, también las de apostar por los tonos rubios que, algunas afortunadas, consiguen de forma natural cuando el sol termina con la melanina de su cabello. Sin embargo, el resto de las mortales y Emilia Clarke nos vemos obligadas a teñirnos para conseguir dar un toque de luz a nuestras melenas. La actriz británica ha estrenado un nuevo look capilar que ya se ha convertido en uno de nuestros favoritos para el verano: atrevido, favorecedor y más fácil de mantener que unas mechas balayage (según su peluquero).

Emilia Clarke se ha convertido en toda una California girl, no por hacerse ondas surferas en su cabello, sino por atreverse con una de las coloraciones favoritas de las actrices de Hollywood y también en Instagram en los últimos tiempos: el rubio brownie, la fusión perfecta entre el tono de pelo rubio y el brunette. Te contamos todo lo que debes saber sobre ella porque todavía estás a tiempo de hacértela para triunfar en verano.

Emilia Clarke
@emilia_clarke

 

¿Cómo es el nuevo tono rubio brownie de Emilia Clarke?

Emilia Clarke ha estrenado un nuevo look capilar este verano, el rubio brownie. Se trata de una tendencia más sofisticada con la que combinar el tono de cabello rubio con el moreno, y así nos lo demostró la actriz durante su última aparición en el Circuito de Fórmula 1. Se trata de un tono color galleta, como su nombre indica, que fusiona a la perfección los tonos más rubitos con los más castaños.  Sienta bien a todo de pieles, desde las más oscuras hasta las más claritas, y potencia el deseado efecto bronceado y crea armonía. Además, se trata de un peinado que resalta los rasgos faciales, disimulando las líneas de expresión, como ocurre con los tonos rubios, pero añadiendo dimensión al rostro.

 

Emilia Clarke
@emilia_clarke

 

Mª José Llata, Presidenta de Intercoiffure España y directora de Peluquería Llata Carrera (Cantabria), confirma que  "la gran ventaja de este tono es que aporta la luminosidad de los rubios y la profundidad y menor mantenimiento de los castaños". Además, nos cuenta como podemos hacer para conseguir este tono de cabello: "Se aclaran algunas zonas de la melena de forma estratégica, como lo haría el sol de forma natural, especialmente en los contornos y las puntas. El resto de la melena se puede iluminar suavemente con babylights pero, al tener una base castaña más oscura, evitamos el efecto raíz". Es, por tanto, un look versátil, práctico y muy fácil de mantener, mucho más duradero y sutil que unas mechas convencionales.

La experta asegura que este rubio brownie es, además, la opción perfecta para todas aquellas mujeres que quieren añadir luz a la melena y al rostro, pero sin dañar en exceso el cabello porque "las aclaraciones se centran en secciones específicas de nuestra melena", explica. Es una técnica que se puede adaptar a todos los tonos de piel y bases de cabello, jugando con los matices y con la intensidad que queramos conseguir. También es un tono de pelo muy favorecedor, perfecto para cualquier corte, desde un peinado bob hasta una melena más larga, e ideal tanto para los cabellos lisitos, como para los rizados u ondulados.

 

¿Cómo podemos mantener este rubio brownie?

A la hora de cuidar este cabello debemos ser muy conscientes con la elección del champú y apostar por uno específico para cabellos dañados. Es vital que mantengamos nuestro cabello hidratado, para evitar que luzca seco y descuidado y, para ello, también debemos completar el lavado con un acondicionador y, al menos dos veces por semana, con una mascarilla, para darle un plus de hidratación y ayudar a que mantenga su brillo. Por último, a la hora de secarlo, es bueno, en la medida de lo posible, que seque al aire. Si nos vemos obligadas a darle calor, es mejor hacerlo sin mucha potencia y con alguna distancia, para preservar los matices del color durante el mayor tiempo posible.